Al final esto fue lo que hice con las berenjenas, rellenarlas de bechamel y queso y luego empanarlas.
Pero vamos por pasos.
Estas son las berenjenas que compré.Las corté en dos rodajas sin llegar a separarlas para luego rellenarlas.
Harina, huevos, pan rallado y queso holandés.
Algo de sal.
Hacemos una bechamel espesita para el relleno.
La abrimos y le ponemos un poco de bechamel y un cuadrito de queso dentro.
Cuando ya las tenemos todas las pasamos por harina, luego el huevo y al final el pan rallado.
Y las freimos en aceite abundante. Debemos ir controlando la temperatura para que no se quemen pero queden bien hechas, pero no enchumbadas de aceite.
Las vamos poniendo en un plato con unas servilletas para que absorvan el aceite, esto es muy importante porque las berenjenas se lo "chupan" facilmente. Pero al estar empanadas si acertamos con la temperatura quedaran crujientes sin quemarse.
Fijaros aun así el aceite que han dejado en la servilleta. Y las he ido cambiando y les doy la vuelta.
¡Ya está listas! Quedaron crujietes y un puntazo el queso fundido dentro, pero dieron un curro.... Bastante tiempo, si te gusta te relajas y lo pasas bien.