Buenas tardes amigos, aquí os muestro otra de mis ensaladas,
de esas que tengo por ahí guardadas por no tener tiempo para publicar las recetas.
Raro es el día que no como algo de ensalada, aunque sea un tomate aliñado.
Si no parece que me falta algo.
En casa, en la nevera, en el frutero y en la mesa nunca falta algo vegetal.
Tengo esa suerte de que me guste casi todo.
Por eso en una ocasión por salud, por recuperar defensas, y hacerle una limpieza a mi organismo, estuve con dieta vegetariana 7 meses y lo aguanté muy bien, cuando el resto de la familia comía de todo.
No les engañaré de que pasé deseos de comer otras cosas, sobre todo por lo golosa que soy.
Cuando esto me pasaba buscaba fruta para quitarme el "mono" o más bien el "gorila" de lo dulce.
La naturaleza es sabía.
Nos regala colores atractivos a la vista.
Olores que nos llamen.
Y como no, sabores que nos sacien.
Golosinas de fruta., como cerezas, cakis, chirimollas, higos.
Muy bajas en calorías, pues también, melón, sandía, piña.
Además son diuréticas, nos ayudaran a eliminar líquidos y toxinas.
¿Qué?
¿Aun dudas de comer fruta y verdura?
No lo dudes, tu cuerpo te lo agradecerá.
En la piel lo verás cuando te mires en el espejo.
INGREDIENTES
Melón
(este era dulce como la miel)
Piña natural en su jugo.
Escarola rizada.
Queso tierno
Una buena ensalada puede ser un plato único.
Un primero, ó una guarnición.
Y en muchas ocasiones mi cena.
Lo mejor de todo es que no lo hago por dieta, si no porque me gusta, por eso no es un sacrificio, es un placer y de paso me cuido.
Así cuando me entra el punto repostero me aprovecho jajajaja